Matías Alé sufrió una nueva crisis nerviosa y fue internado de urgencia
El actor Matías Alé sufrió un cuadro de “desorientación”, que en un principio se vinculó con una recaída del brote psicótico que padeció el pasado noviembre, y tras ser llevado de urgencia al Sanatorio Finochietto se dispuso su internación en una clínica psiquiátrica.
Según informaron en la tarde del miércoles los médicos que lo asistieron en el Finochietto, adonde llegó de urgencia en las últimas horas, el traslado se decidió tras comprobarse que clínicamente se encontraba estable. “Ahora es importante profundizar el tema psiquiátrico. El paciente sufrió una desorientación”, señaló el médico Norberto Furfaro.
En declaraciones a la prensa en la puerta del sanatorio, el profesional explicó que “desde el punto de vista clínico está estable”. “Reconoce personas, se reconoce a sí mismo. Es consciente de que está en un sanatorio”, mencionó. También dijo que ya se dispuso su traslado “a una clínica especializada en psiquiatría”, Avril, ubicada en el barrio de Almagro.
Todo comenzó cuando el actor sufrió una nueva crisis nerviosa mientras se hallaba en la vivienda de su hermano, en la localidad bonaerense de Acassuso, y tuvo que ser internado de urgencia. En medio de una ola de versiones que indicaban diferentes comportamientos violentos que habría protagonizado, personal médico llegó en las últimas horas hasta la vivienda del hermano de Alé en la zona norte del conurbano y lo trasladó en ambulancia a la clínica porteña donde quedó internado.
Alé habría atacado a su hermano, se quiso tirar por el balcón, y habría estado manipulando una espada, según algunas de las versiones que trascendieron.
Su amigo Alejandro “Huevo” Müller confirmó que el actor fue llevado de urgencia al Sanatorio Finochietto y dijo: “Lo vi mal, otra vez está brotado”.
El actor tenía pautado realizar una nota en vivo para el programa “Informadísimos”, pero se ausentó sin aviso. La producción del programa intentó comunicarse con él, pero tampoco respondió los llamados al celular.
Tras recibir un llamado al 911, la Policía se hizo presente en la vivienda donde estaba el actor, un departamento del hermano de Alé ubicado en la localidad bonaerense de Acassuso. Efectivos de la comisaría 4ta de San Isidro habrían indicado que el actor estaba manipulando una espada, y se investigaba si el arma estaba afilada y si era de verdad.
En noviembre pasado, el actor había sufrido un brote psicótico y estuvo internado más de 40 días en la clínica psiquiátrica a la que fue derivado nuevamente el miércoles. Luego continuó con un tratamiento ambulatario y ahora se preparaba para debutar con la obra teatral “Mr. Amor, casi, casi un galán”, junto con Noelia Marzol, Belén Francese y Álvaro Navia.
“Esto resultó extraño para todos los que estábamos ensayando la obra que estrenábamos el 9 de julio. El viernes fue el último día de ensayo y estaba bien”, aseguró Álvaro Navia. Explicó que “Alé estaba contento y llegaba siempre en hora a ensayar”. “Él era el protagonista de la obra y el que más letra tenía. Yo hago de psicólogo y hacíamos chistes sobre eso”, indicó.
Según Navia, Alé les contó que “seguía con el tratamiento y que estaba en un proceso de ir dejando los medicamentos”. “Él decía que iba progresando en su terapia y sanación. Esto es lo que puedo contar de este mes y medio que estuvimos ensayando con él”, agregó.
En referencia a la nueva crisis sufrida por Alé, Navia dijo: “Estamos todos muy sorprendidos y preocupados por su salud”. “La obra pasa a un segundo plano. Ahora queremos saber cómo está Matías”, expresó.
Por su parte, la exmujer de Alé, María del Mar Cuello de Molar, afirmó: “Esto no es un brote por estrés de trabajo, acá hay algo más grave”. “Hay que ayudar a Matías. Me gustaría que la madre salga a hablar ahora”, dijo.
Tras insinuar que en esta nueva crisis habría un tema de adicciones, mencionó sobre su exmarido: “Que esté saliendo todas las noches no es bueno”. “Su entorno encubre las cosas malas que hace. Esto es muy grave y está mal en serio”, aseguró.
Fuente: Noticias Argentinas