Obama no quiere “negociaciones conflictivas” por el “Brexit”
El presidente estadounidense, Barack Obama, insistió el viernes que el “Brexit” no dañará las relaciones transtlánticas, pero advirtió sobre un divorcio “conflictivo” del Reino Unido con la Unión Europea (UE), cuando Occidente busca mostrarse unido frente a Rusia. Washington siguió de cerca el proceso británico que terminó con la decisión de que el Reino Unido saliera de la Unión Europea, abriendo el camino a un incierto e inédito proceso que Londres aún no activó a pesar de las presiones de las capitales europeas.
En Varsovia, Obama aprovechó para enviar un claro mensaje a Londres y Bruselas para que avancen de manera amigable en el proceso de ruptura. “Nadie tiene interés en negociaciones largas y conflictivas”, dijo Obama en una rueda de prensa, reconociendo no obstante que la decisión de los electores británicos creó incertidumbre sobre la integración europea, así como sobre las relaciones de Estados Unidos con el Viejo Continente.
El Reino Unido, potencia nuclear y miembro permanente del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), es el mejor aliado de Estados Unidos en Europa, con quien mantiene una “relación especial”.
Obama se declaró “confiado” en que la Unión Europea y Londres lograrán una “transición ordenada” y consideró que era “quizás el momento más importante para las relaciones transatlánticas desde el fin de la Guerra Fría”.
El Reino Unido no da la espalda
El primer ministro británico, David Cameron, que asiste como Obama a la última cumbre de la Alianza Atlántica de su mandato, aseguró que el Reino Unido no tendrá “un papel menor en el mundo” luego del “Brexit”. “No estamos dando la espalda a la OTAN”, dijo el primer ministro.
El Reino Unido es el mayor contribuyente de la Alianza en Europa.
Por su parte, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, volvió a insistir que el “Brexit” cambiará inevitablemente los vínculos de Londres con la Unión Europea “pero no la posición de liderazgo del Reino Unido dentro de la OTAN”.
En Varsovia, los 28 líderes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) reafirmaron su presencia en el este europeo.
La cumbre, que continuará el sábado, se celebra en la simbólica capital polaca, en donde en 1955 la Unión Soviética firmó el Pacto de Varsovia para contrarrestar la creación años antes de la Alianza Atlántica.
Los 28 líderes ratificaron el viernes la mayor reforma a su “defensa colectiva” desde el fin de la Guerra Fría, en respuesta a la anexión de Crimea por en Rusia en 2014 y la desestabilización en Ucrania. El plan de respuesta, esbozado por la OTAN en la cumbre de Gales en 2014, el Readiness Action Plan, alienta a los miembros de la Alianza a respetar un mínimo de gastos militares de 2% del Producto Bruto Interno (PBI) y cesar los recortes.
Para sosegar a los aliados que se independizaron de Moscú a principios de los 1990, la OTAN decidió reforzar su “Fuerza de Respuesta” (NRF, Nato Response Force) triplicando sus efectivos hasta 40.000 soldados y creando una “punta de lanza” (Spearhead) de 5.000 hombres capaz de desplegarse en sólo días en cualquier foco de crisis.
Los mandatarios también avalaron oficialmente despliegues adicionales en Polonia y los tres países Bálticos. Cuatro batallones adicionales (entre 600 y 1.000 soldados cada uno) serán desplegados sobre la base de una rotación en esos cuatro países que comparten frontera con Rusia. En Polonia, Obama confirmó el despliegue de 1.000 militares estadounidenses.
Esta decisión no tiene precedentes desde el fin de la Guerra Fría y el Acta Fundacional de 1997 que rige las relaciones OTAN-Rusia y establecía la reducción de las fuerzas convencionales en Europa y Rusia.
Fuente: Noticias Argentinas