Declaró la adolescente que mató a un motociclista con un Mini Cooper en Misiones
La adolescente de 15 años que embistió y mató a un motociclista con un auto Mini Cooper que le habían regalado para su cumpleaños, y que manejaba a pesar de no tener registro, declaró ante la Justicia misionera, se mostró acongojada y dijo que le quiere pedir perdón a la familia del joven fallecido.
La chica pidió asistencia psicológica al declarar por el hecho en el que perdió la vida el motociclista Juan Francisco González, de 22 años, en un hecho ocurrido el domingo en la capital misionera.
La actitud de la menor ante la Justicia se contrapone con la que había exhibido en su cuenta de la red social Instagram, donde desafió a las personas que la criticaban con la expresión “que sigan curtiendo”, al acusarlos de cuestionarla sin saber cómo ocurrieron los hechos.
La menor ya había sido citada para el lunes pasado, pero su padre la excusó de presentarse ante la Justicia porque aseguró que se encontraba muy afectada emocionalmente.
En tanto, según lo informado por medios locales, el juez de la causa, César Giménez, advirtió que es “fundamental” conocer a la persona que decidió que la adolescente conduzca el costoso auto deportivo y aseguró que el padre de la joven se mostró “acongojado”, mientras que garantizó que se iba a hacer cargo de “todas las costas económicas en torno al caso”. “Lo noté muy abatido anímicamente al hombre, no obstante me manifestó toda su voluntad de colaborar con la justicia para que el hecho se esclarezca lo más rápido posible”, expresó el juez.
Javier Noguera, abogado de la familia, aseguró que no fue el padre de la chica el que autorizó que condujera el Mini Cooper y señaló que todo ocurrió en medio de “un acto de indisciplina o chiquilinada”. El letrado sostuvo que “la chica tomó las llaves del Mini Cooper y salió a pegar una vuelta, con las consecuencias posteriores que después todos conocimos”.
El episodio ocurrió en las primeras horas del domingo en las afueras de Posadas, cuando la menor atropelló y mató al motociclista con un Mini Cooper, patente NOF 453, que su padre le había regalado al cumplir los 15 años. El auto conducido por la menor no poseía seguro, ni cédula verde y la joven se negó a someterse al control de alcoholemia.