Córdoba: Por el paro implementan un plan de emergencia en el transporte
El municipio de la ciudad de Córdoba implementará mañana un ‘Plan de Emergencia del Servicio de Transporte’ urbano de pasajeros con la puesta en funcionamiento de entre 120 y 150 colectivos del total de un poco más de 800, para mitigar la falta del servicio por el conflicto salarial de los choferes que hoy cumple siete días consecutivos de paro total de actividades.
Sobre el final de esta tarde el secretario de Transporte de Córdoba, Julio Waisman, precisó en conferencia de prensa que el servicio de emergencia será gratis, funcionará entre las 7 y las 21 y cubrirá los principales trayectos de los 9 corredores troncales (10, 20, 30, 40, 50, 60, 70, 80 y trolebús B).
En todos los casos las unidades serán conducidas por choferes que no están de acuerdo con el conflicto, además se evaluará la posibilidad de contratar otros conductores, y en todos los casos la circulación estará garantizada por custodia del personal de Gendarmería Nacional, Policía Federal y Policía de la Provincia, precisó el funcionario.
Más temprano el intendente de la capital de Córdoba, Ramón Mestre, al anunciar el plan de contingencia, manifestó que solo es “un respiro para los ciudadanos de Córdoba hasta recuperar la normalidad”.
Asimismo calificó de “violentos” a los choferes al sostener que “no solo están yendo contra las instituciones de gobierno; sino contra la ley, contra todos. Y ello, en un contexto inédito en el que Córdoba está saliendo de años de discriminación. Avergüenza que no quieran que Córdoba progrese”.
Sobre el reclamo de los trabajadores, Mestre se preguntó: “¿Los verdaderos motivos?, una paritaria legal, nacional y desconocida acá en Córdoba; un proceso de regularización institucional de UTA deslegitimado”.
“Una oportunidad político partidaria de la izquierda, del kirchnerismo (incluso, de la propia ex presidenta) al “nacionalizar” un conflicto sectorial como un reclamo nacional al gobierno del presidente Mauricio Macri. Sí, el kirchnerismo, el mismo que literalmente discriminó a Córdoba; incluso, que tuvo acá su peor derrota, fogoneando la violencia. Este es un conflicto que afecta a todos”, añadió.
Mestre consideró además que “necesitamos recuperar el Estado de Derecho y el contrato social básico para la convivencia ciudadana”.
Para ello marcó varios puntos, en los que destacó el anuncio de que mañana habrá unidades de transporte que presenten servicio custodiadas, afirmó que los más de 70 trabajadores “despedidos la semana pasada, han perdido su fuente laboral”.
“He decidido adelantar la convocatoria del Consejo Económico y Social de la ciudad que lo integran todas las fuerzas vivas de Córdoba, para mañana lunes. El llamado de una consulta popular, para que los vecinos se expresen sobre el transporte como servicio esencial; las asambleas de los servidores públicos en horarios de trabajo y las políticas de transparencia”, adelantó el intendente.
Sobre el tema, dijo que “necesitamos el respaldo ciudadano y definitivo para avanzar y recuperar el Estado de Derecho en Córdoba. Para hoy y para siempre”.
Por último, Mestre pidió “por favor” a los legisladores provinciales y nacionales que avancen en las herramientas legales que permitan garantizar los servicios públicos como esenciales. “Voy a mantener reuniones con todos ellos en los próximos días”, aclaró.
El conflicto comenzó a gestarse el 2 de junio con asambleas y desde la madrugada del lunes 5 se comenzó a aplicar el paro total de actividades, que ininterrumpidamente se mantiene hasta hoy, en rechazo al 21% del acuerdo salarial para el sector alcanzado por conducción nacional de la Unión Tranviarios Automotor (UTA). Los choferes exigen para Córdoba alrededor del 32,5%, además de la normalización de la UTA local que se encuentra intervenida desde el año pasado.
La medida de fuerza afecta a las cuatro empresas que prestan en servicio urbano de pasajeros en la capital cordobesa: Aucor, Coniferal, Ersa y trolebuses Tamse.
El arzobispo de Córdoba, Carlos Ñáñez, en su homilía de este domingo se refirió al conflicto al que calificó como “una violencia que en el ámbito social tiene el origen en imprudencias verbales de algunos dirigentes que no miden suficientemente las consecuencias imprevisibles que sus dichos pueden desencadenar”.
Esa imprudencia, dijo, “comporta una serie responsabilidad sobre quienes se expresan de esa manera. Sobre todo teniendo en cuenta que son referentes de distintos sectores y que tienen un protagonismo en la sociedad. Una violencia que afecta la institucionalidad” porque “no se respetan las normas que rigen las instituciones y la sociedad”.
La medida de fuerza
El paro comenzó el último lunes a las 4 de la madrugada luego que el sector rechazara el acuerdo salarial del 21 por ciento en tres tramos (entre junio y diciembre) acordado por la UTA nacional, que es traslativo a Córdoba.
Los choferes exigen que se aplique un criterio distinto para Córdoba, para que represente un incremento salarial de alrededor del 33 por ciento.
Además, los colectiveros indicaron que su reclamo no es solamente salarial, sino que también exigen “condiciones laborales adecuadas”, como por ejemplo un mejor estado de colectivos que conducen todos los días.
Por las medidas de fuerza, que mantiene a miles de usuarios sin servicio de transporte, durante la semana pasada despidieron a más de 70 trabajadores de las empresas Ersa, Aucor, Coniferal y Ersa.
Esta tarde en el municipio se informarán los detalles del Plan de Emergencia del Servicio de Transporte con unidades custodiadas.