Apartaron parcialmente al fiscal que pidió que caiga Mauricio Macri
El juez federal con competencia electoral Ricardo Bustos Fierro hizo lugar a la recusación planteada por el PRO de Córdoba y apartó parcialmente al fiscal federal Enrique Senestrari, quien había pedido que “caigan Macri y Temer”.
En ese sentido, el magistrado ordenó separar a Senestrari, fiscal con competencia electoral, del conocimiento de todas aquellas causas en las que interviene el PRO. Asimismo desestimó apartar a Senestrari de las causas en las que tiene participación el Frente Para la Victoria.
La recusación, firmada por Oscar Agost Carreño, apoderado del PRO en la provincia mediterránea, fue elevada tras las declaraciones de Senestrari contra Macri, durante una entrevista en el programa radial El Club de la Pluma que se emite por FM Inédita de Cosquín. Durante el reportaje, el conductor Norberto Ganci manifestó “Si se cae Temer, que se lo lleve en la caída de la manito y de un abrazo a Macri también, ¿no?” y la respuesta de Senestrari fue categórica: “A Macri y a todos los políticos que están haciendo estas cosas…”. El juez Bustos Fierro sostuvo que con esa declaración, el fiscal dejó plasmada la animadversión hacia el máximo referente de la fuerza política que representa al partido recusante.
Además mencionó otra declaración pública de Senestrari, integrante de Justicia Legítima, durante una entrevista en la radio FM Latina en la que aseguró: “Yo prefiero que no hayan gobiernos como el de Macri, no quisiera que gane elecciones… porque en un gobierno que le está haciendo mucho mal a la sociedad argentina”.
En su resolución Bustos Fierro destacó que “estas últimas manifestaciones públicas, comprueban fundadamente el temor cierto del recusante y acreditan la pérdida de objetividad, vulnerando de esa manera la conducta neutral con que el magistrado debe desempeñar sus funciones para poder dictaminar respecto a la existencia y subsistencia de una agrupación política”.
El magistrado sostuvo que “en su respuesta a la recusación sólo se argumenta con un tinte personal, pasional e ideológico sin que cada uno de esos argumentos se encuentre respaldado por alguna normativa, caso jurisprudencial o análisis doctrinario de ningún tipo”.