Alertan por una caída en los salarios reales registrados de entre 4 y 8% en 2018
La consultora Ecolatina publicó un informe en el que advierte por el aumento en la conflictividad social y la caída en la imagen del Gobierno por la baja en el poder adquisitivo.
El salario real de los trabajadores registrados sufriría una pérdida promedio de 6% respecto a 2017, de acuerdo con un informe de Ecolatina. Según la consultora económica, los empleados públicos serán los más perjudicados este año, con una baja de 8% interanual, al tiempo los privados registrados tendrían una retracción de 4,5.
Respecto a los trabajadores informales, sector más vulnerable a los vaivenes económicos, el revelamiento destaca que sufrirán en mayor medida la recesión “ya que la misma destruirá puestos de trabajo limitando sensiblemente su poder de negociación”.
De acuerdo con lo que indica Ecolatina, sin una reapertura generalizada de paritarias, el salario real podría perder caer en promedio más de 12% durante el segundo semestre. A su vez, “dado que dicha contracción del poder adquisitivo sería muy nociva para el consumo interno, acrecentaría la conflictividad social y minaría la imagen pública del gobierno”.
Sin embargo, la consultora estima que los aumentos llegarían en el cuarto trimestre, luego de que la suba de precios acumule cerca de 13% en el período julio-septiembre, “por lo que la contracción del salario real sería igualmente significativa”.
“Pese a los ingresos adicionales conseguidos (sumas fijas, aumentos o adelantamiento de subas), el salario real de los trabajadores formales caería en promedio 10% interanual durante la segunda mitad de 2018”, argumenta el informe.
Respecto al escenario de 2019, los analistas de Ecolatina consideraron “difícil” que se logre revertir esta dinámica. “La ambiciosa meta de equilibrio fiscal recientemente anunciada para 2019 presionará la inflación vía recortes de subsidios económicos y contendrá los aumentos salariales de los trabajadores públicos”, explicaron.
Asimismo, en Ecolatina no prevén mayor dinamismo de la demanda interna, lo que le pondrá un techo a la capacidad de recomposición salarial del sector privado. “Por lo tanto, pese a que podrían esperarse algunos incrementos reales en el segundo semestre de 2019 (la inflación iría cediendo si no se vuelve a disparar el dólar), el año promediaría una leve merma. Si estas proyecciones se cumplen, el salario real formal se ubicaría 9% por debajo de las elecciones de 2015”, remarcaron.