La Plata: un chico eligió al bombero que le salvó la vida
Patricio, de 14 años, siente una profunda admiración por los bomberos luego de que los rescataran un incendio en el que murió su mamá y su hermana. “Es un honor para mí y para la formación de la que formo parte”, dijo el servidor público.
Cuando tenía 7 años, Patricio vivió el momento más trágico en su vida: un incendio que le costó la vida a su madre y su hermana. Pero esa desgracia familia lo marcó no sólo por esas importantes pérdidas afectivas, sino también por la profunda admiración que siente desde entonces por el trabajo que realizan los bomberos.
Es que el cuerpo de voluntarios de Berisso tuvo una participación decisiva para evitar que Patricio también muriera en ese siniestro ocurrido el 14 de mayo de 2011, en una casilla de madera y chapas que estaba en la calles 8 y 157, de esa ciudad.
Según informa El Día, el joven nació con TGD (Trastorno Generalizado del Desarrollo) por lo que tiene un síntoma de esa patología como lo es el autismo, también tiene dificultades para caminar por padecer Pie Bot (malformación que se caracteriza por el aumento del arco del pie) y algunos inconvenientes en el aprendizaje, pero eso no le impide destacarse en la escuela, ya que es uno de los mejores alumnos.
Hasta la fecha, Patricio conserva una relación de amistad con quien lo rescató alzándolo en sus brazos entre las llamas, el comandante de la Escuadra de Reserva de ese cuerpo de bomberos, Roberto Sacafati.
La relación se hizo profunda. Al punto que hoy a sus 14 años, Patricio eligió como padrino de la ceremonia religiosa de Confirmación a Sacafati, también escogió como madrina a otra persona que considera sumamente valiosa en su vida: su maestra de clases de equinoterapia, Marta Centurión.
“Siente una admiración profunda hacia los bomberos, porque les reconoce haberle salvado la vida. Y más todavía con Roberto (Sacafati), que además de ser quien lo puso a salvo del incendio, le regaló el casco y una remera de bomberos”, dijo la abuela de Patricio, Mónica Cabello.
“Fue una alegría enorme. Un honor para mí y para la institución a la que formo parte”, aseguró Sacafati.