Temor en Japón por el hallazgo de un mal presagio en el mar
Son las mismas señales que recibieron antes del terremoto y posterior tsunami en 2011 cuando murieron más de 20.000 personas.
Cada vez que aparecen, luego se desata un desastre natural, por lo que su llegada siempre es interpretada como un mal presagio. Sucede que recientemente, en una de las tantas playas de Japón, descubrieron a tres peces remos muertos: cuando se presentan en la superficie, luego se desatan terremotos o tsunamis.
A raíz de esto, varios usuarios grabaron videos que luego subieron a YouTube y se hicieron virales rápidamente. Más que asustados, en Japón no paran de hacer conjeturas acerca de lo dañino que puede ser encontrarse con estas especies.
De acuerdo a las publicaciones difundidas, dos peces remo aparecieron muertos en la orilla de la bahía de Toyama, mientras que otro animal marino de la misma especie fue hallado dentro de una red de pesca en el puerto de Imizu.
En Japón existe infinidad de material que habla sobre la leyenda de los peces remo, los cuales son conocidos en el mundo nipón como los “mensajeros del palacio del Dios del mar”, ya que cada vez que aparecen en la superficie hay un terremoto.
Estos peces suelen vivir en aguas muy profundas. Son criaturas marinas muy respetadas por los japoneses ya que antes del tremendo terremoto y posterior tsunami de Fukushima que sacudió el noreste de Japón en 2011, aproximadamente 20 peces remo fueron encontrados muertos en la zona.
De acuerdo a lo investigado, no hay evidencia científica que demuestre el vínculo entre el avistamiento de peces remos y los terremotos, pero para los japoneses estas especies sienten los desastres naturales antes de que se produzcan.
Para Kiyoshi Wadatsumi, un sismólogo japonés, los peces remo, así como otras especies que viven en aguas profundas, suelen ser muy sensibles a movimientos irregulares en el fondo marino.
Hay que resaltar que el pez remo no solo aparece en las playas de Japón, sino también en otros países, incluso en Tacna, en Perú, donde esta criatura quedó varada y provocó miedo en miles de personas que esperaban un desastre.
El remo es el pez óseo más largo del mundo, alcanzando una longitud de 11 metros. Sin embargo, se detectaron que hay ejemplares de hasta 17 metros. En general mide alrededor de 3 metros. El peso máximo registrado en un pez remo gigante es de 272 kilogramos. Su forma es parecida a una cinta, con una aleta dorsal a lo largo de toda su longitud, partiendo de entre los ojos hasta la punta de su cola. Los radios de las aletas son pequeños y pueden tener hasta 400 o más.
A la cabeza de los peces, los rayos se alargan formando una cresta roja distintiva. Su aletas pectorales y pélvicas son casi adyacentes. Las aletas pectorales son regordetas mientras que las aletas pélvicas son largas, de una sola raya, y que recuerda a un remo en forma, y con una ampliación en la punta, de ahí su nombre. Su cabeza es pequeña, tiene entre 40 y 58 branquiespinas y no posee dientes. Se alimenta de krill y otros crustáceos pequeños, así como de peces pequeños y calamares. Además, tiene una distribución cosmopolita en todos los océanos, con excepción de las regiones polares.