Kicillof anunció un aumento de sueldo para la Policía Bonaerense: “Un básico de 44 mil pesos de bolsillo”
El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, anunció este jueves por la mañana que el salario mínimo de los oficiales de la Policía Bonaerense que iniciaron el lunes una revuelta en toda la provincia, y que incluyó una protesta en la Quinta de Olivos, aumentará un 17,3% al pasar a cobrar $44 mil de bolsillo, similar al que reciben los efectivos de la Policía Federal.
“Vamos a destinar una parte de los recursos a empezar a equiparar el salario de la Policía Bonaerense con la Policía Federal. Ése sendero comienza hoy. Habrá una equiparación inmediata de 39.521 oficiales de Policía que pasarán a percibir un salario de bolsillo de 44 mil pesos”, sostuvo el mandatario provincial. Y agregó que el monto para la compra de equipamiento para cada efectivo será de “5 mil pesos”, así como también las horas CORE “se triplicará a 120 pesos”.
En total, la Provincia tiene unos 90 mil efectivos, explicaron voceros del gobernador a minutouno.com. El incremento comunicado en conferencia de prensa por Kicillof abarca sólo a los que recién se inician, poco más de 39.000 agentes, pero el aumento se dará a todos los escalafones de los policías. Los detalles de los porcentajes de suba según la escala se darán en las próximas horas, aseguraron.
El gobernador brindó una conferencia de prensa con varios de los intendentes bonaerenses. No está ninguno de Juntos por el Cambio. “Hasta Vidal reclamó la coparticipación, sólo que no lo logró”, dijo a la vez que subrayó que “el sueldo de los policías cayó 30 puntos en 4 años; fue el que más perdió de todos”.
Kicillof remarcó que brindó “una respuesta contundente, histórica y de fondo” al conflicto con la Policía Bonaerense y afirmó que si no se levantan las protestas, quedará en evidencia que “es una cuestión política, totalmente distinta”.
“Dentro de la ley todo, fuera de la ley nada. No era la manera, porque muchas veces se deslegitiman reclamos legítimos”, se quejó el mandatario provincial.
Y agregó: “Vimos imágenes espantosas: frente a la Quinta de Olivos, frente a mi propia residencia, donde vivo con mi familia. Esas imágenes no deben volver a repetirse. La sociedad necesita que terminemos con esto. Si esto es un reclamo salarial y de condiciones de trabajo, estamos dando una respuesta contundente, histórica y de fondo. Sino, vamos a comprender que es una cuestión política, totalmente distinta”.