Mauricio Macri aseguró que es víctima de “persecución política”
Este miércoles, Mauricio Macri reiteró que se siente víctima una “persecución política” luego de conocer que el juez federal de Dolores, Martín Bava, lo procesara por supuesto espionaje ilegal contra familiares de los tripulantes del submarino ARA San Juan, que se hundió el 15 de noviembre de 2017.
Macri se enteró de la decisión de la Justicia mientras participaba en Chile de una actividad vinculada a su rol como presidente de la Fundación FIFA. El expresidente apuntó contra el juez Bava cuando salía del hotel Sheraton de Santiago de Chile, desde donde emprendió el regreso a Buenos Aires. “Es una persecución política que ya todos sabíamos. Es mucho más incómodo para la Justicia argentina tener jueces como Bava”, afirmó el exjefe del Estado, quien recibió el respaldo de la cúpula de Juntos por el Cambio.
El juez federal de Dolores lo embargó en 100 millones de pesos y le volvió prohibir que salga del país. Esa medida le impediría al exmandatario cumplir con compromisos de su agenda internacional. “Es ridículo. Bava cumplió con lo que le pidieron. Esto tiene una clara connotación política”, señalaron cerca de Macri, quien se reunió hoy con el presidente de Chile, Sebastián Piñera, en el Palacio de La Moneda.
El expresidente esperaba que el magistrado, a quien acusa de ser “incompetente” y “totalmente parcial”, dictara su procesamiento antes de los comicios generales del 14 de noviembre. Es más, se lo dijo a Bava en su indagatoria, cuando presentó un escrito y no respondió preguntas: “Usted está muy apurado para procesarme antes de las elecciones”, le espetó al juez. Y lo acusó de actuar con fines electorales.
En el entorno del exmandatario esperaban la decisión del juez, pero les sorprendió el momento: “Es llamativo que se haya demorado tanto. Cada vez que Mauricio sale del país, la persecución se profundiza”, apuntaron fuentes del círculo de confianza de Macri. La defensa judicial del exmandatario y líder histórico de Pro está a cargo de Pablo Lanusse.
Macri entiende que es víctima de una “persecución política”. En un sector de Pro vinculan la embestida contra su figura con un supuesto “resentimiento” del kirchernismo duro con el rol “internacional” del exmandatario y su vínculo con algunos líderes mundiales. Incluso, recuerdan que la vicepresidenta Cristina Kirchner dijo que “no sabía si reírse o llorar” cuando Macri viajó a Miami, en Estados Unidos, y trascendió que tomaba clases de economía en la Universidad de Internacional de La Florida. “Esto es una demostración de que no tienen nada [contra Macri]. Era cantado que esto iba a pasar tarde o temprano. Es parte de la persecución, con una clara intencionalidad política”, remarcaron allegados a Macri.
Además, señalaron que es “sugestivo” que Macri haya sido procesado días después de que Cristina Kirchner fuera sobreseída sin necesidad de juicio oral en la causa que investiga supuestas maniobras de lavado de dinero en la administración de los hoteles de la familia de la vicepresidenta. “Esto estaba al caer. Más claro, echale agua”, afirmaron cerca del fundador de Pro. Y apuntaron contra el juez Bava: “Es totalmente imparcial, carece de autonomía e independencia. Es incompetente”. Además, sostuvieron que la causa debería tramitarse en los tribunales federales de Comodoro Py, no en Dolores. “El Presidente trabaja en la Capital”, argumentaron.