La ciencia refuta a la historia y saca algunos trapos al sol
El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) inaugurado por el presidente de México Andrés Manuel López Obrador (AMLO), en 2022, no habrá alcanzado su meta de pasajeros, por quedar lejos del DF, pero fue un festín para los arqueólogos, quienes desenterraron de las fosas 112 esqueletos, los cuales revelan secretos de la vida prehispánica.
Marcan un antes y un después en las relaciones dentro de la región, sobre las que la historia guardaba silencio, por ignorancia o encubrimientos.
Los resultados que arrojaron los análisis de los restos humanos procedentes de cinco sitios, todos en una misma área; ‘Tlatel 7’ y ‘Sin cuadrícula 5’, ambos del periodo Coyotlatelco (600-900 d.C) y ‘Xaltocan polígono 6’, perteneciente al Posclásico Tardío (1200-1500 d.C), dieron lugar a hipótesis de los científicos de que conflictos no registrados entre la región de Xaltocan y de Cuautitlán determinaron un alto grado de mortalidad infantil en la primera de ellas.
Al otro lado del Atlántico, en el Reino Unido, el grupo Time Team, el National Trust del Reino Unido y FAS Heritage, descubrió en una excavación realizada en la localidad de Sutton Hoo piezas que formarían parte de un cubo de cobre que data de más de 1500 años, originario de Turquía, que proporciona data fehaciente sobre de la edad media en Occidente.
Se trata del Cubo de Bromeswell, una reliquia que posee descripciones gráficas de la caza norafricana con la presencia de leones y un perro. Su aleación de cobre indica que probablemente fue creado en el siglo VI en Antioquía, bajo dominio turco.
Se lee una inscripción en griego que dice “Utiliza esto con buena salud, Maestro Conde, por muchos años felices”, lo cual permite inferir que se trataba de un obsequio.
La historia oficial no encaja acerca de cómo llegó a Sutton Ho el que podría ser un obsequio diplomático, lo cual no sería de extrañar dada la cercanía del imperio otomano y la que luego sería Inglaterra.
Pero las múltiples soldaduras que presenta la pieza aleja tal posibilidad luego de ser sometida a estudios de fluorescencia que sugieren que llevaba varios años en suelo británico.
¿Llegó como botín y las relaciones no eran las que se escribieron? ¿Se trataba de ofrendas que agradecían gestos trascendentes para la geopolítica de entonces?
Aquella amistad no se reflejó, en abril de 1920, cuando Reino Unido arrancó con Francia una conferencia en una pequeña población de la Riviera italiana cuyo objetivo era oficializar el reparto del Medio Oriente otomano.
Estos hallazgos recientes van mostrando que la historia que se conoce no era tan así, debido a que no tiene explicación aún que apareciera junto a las ruinas del templo del dios Amón un barco de 25 años oculto bajo cinco metros de barro, muy raro para el siglo II ac, como el que halló una misión egipcio-francesa en Thonis-Heracleion, una ciudad sumergida bajo las aguas del Mediterráneo frente a las costas de Egipto y próxima a la localidad costera de Alejandría.
Alto grado de mortalidad infantil
La historia que sale a la superficie con las muestras extraídas por el Proyecto de Salvamento Arqueológico en el aeropuerto mexicano, cuya mitad proviene del sitio de ‘Xaltocan’ corresponden a infantes e incluso algunos fetos, lo que refuerza la teoría de que existía un alto grado de mortalidad infantil.
Nada se sabía hasta ahora de que las niñas y niños del lugar estuvieran sometidos a un estrés constante que, aunado a una mala alimentación, según surge ahora de la teoría elaborada por los investigadores.
Atribuyen esa consecuencia a conflictos que Xaltocan tenía con Cuautitlán, lo cual es probable que los haya debilitado.
Asimismo, el esqueleto de una mujer de mediana edad que presenta una fractura en el brazo por una amputación que “debió ser extremadamente dolorosa” permitió al responsable de la investigación, Jorge Arturo Talavera González, extraer conclusiones: “Lo interesante es que las huellas de los huesos muestran crecimiento del tejido óseo, lo que indica que, además de que la mujer sobrevivió entre cinco y siete meses, después del evento traumático, se le colocó una prótesis para ayudarla a estabilizar el brazo y sanar, lo cual era imposible sin cirugía, por lo que finalmente falleció, posiblemente, a consecuencia de una infección”.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) acaba de informar los resultados que arrojaron los análisis de los restos humanos encontrados durante los tres años que duró la construcción del aeropuerto.
El análisis del material arqueológico se realizó de noviembre de 2021 a marzo de 2024, y se entregaron dos informes sobre los estudios de antropología física al Consejo de Arqueología del INAH de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México.
Los restos óseos recuperados se conservan en la antigua Alhóndiga, sede de la sección de bioarqueología de la Dirección de Salvamento Arqueológico (DSA) junto a más de quinientas cajas con ejemplares de las épocas prehispánica y colonial.
Según los científicos, tienen muchas novedades que contar sobre aspectos de la vida prehispánica en dicha zona.
Los cimientos de la humanidad
Hoy en día se sabe que los inicios de la humanidad se formaron a partir de las primeras civilizaciones antiguas.
Con el paso de los años y los siglos, estas han ido variando hasta conformar la sociedad que conocemos en la actualidad, pero dejaron algunos objetos que poseen una relevancia histórica importante, como las piezas formarían parte de un cubo de cobre de origen turco que data de más de 1500 años y fueron descubiertas en la localidad de Sutton Hoo, del Reino Unido. Otras piezas se hallaron a finales de la década de 1980 y luego en 2012.
Sutton Hoo es famoso en todo el mundo por su emblemático entierro en forma de barco anglosajón que se encontró en 1939 por excavaciones.
Este descubrimiento sacó a la luz una cámara funeraria llena de objetos valiosos que pertenecieron a una figura adinerada e importante que murió a principios del siglo VII d . C.
Esta era una época anterior a la existencia de “Inglaterra” como entidad unificada.
También era extremadamente raro que se realizaran entierros en barcos en esta época, por lo que es probable que la persona que se encontraba allí fuera de gran importancia.
Algunos incluso han sugerido que se trataba del rey Raedwald, que gobernaba el reino de East Anglia en esos tiempos.
Un nuevo capítulo en la historia de Sutton Hoo asoma a la luz.