Los siete regalos clásicos de San Valentín
San Valentín es una fecha especial, donde las parejas se unen para celebrar su amor. Algunos festejos suelen ser más elaborados que otros, de acuerdo a las posibilidades de cada integrante, pero siempre está acompañado por algún presente.
A la hora de sorprender, la creatividad humana no tiene límites. Sin embargo, en muchos casos se recurre a los regalos más “convencionales” que, pese a ello, transmiten un gran valor emocional por parte de quien lo entrega.
La acción de regalar tiene sus beneficios. Numerosos estudios psicológicos a lo largo de los años demostraron que este intercambio social y emocional entre dos personas genera empatía y aumenta la autoestima.
Según un estudio publicado en Journal of Experimental Psychology, la persona que hace un regalo obtiene mayores beneficios que aquel que lo recibe, ya que intenta plasmar de alguna forma una parte de sí mismo en el objeto elegido.
En línea con esta investigación, estos son los siete presentes más elegidos para las mujeres en San Valentín:
Una rosa
Por lo general, la rosa suele ser la flor más obsequiada en esta fecha, por todo lo que significa. Amor, sensualidad y encanto son algunas de las cualidades que la describen simbólicamente. También, un ramo con variedad de flores, o un arreglo floral, acompañado por una tarjeta con un sentimental mensaje escrito a mano.
Una caja de bombones
Las golosinas dulces, más que nada el chocolate, invoca a la calma y reduce la agresividad, aumentando la producción de serotonina, conocida como la hormona del bienestar, según un estudio del Centro Médico de la Universidad de Maryland. Además, es un buen presente como muestra de afecto hacia la pareja. Junto a las flores, los bombones forman un dúo infalible si se trata de conquistar desde el lado amoroso.
Bijouterie
Muchas parejas optan por un regalo material más costoso: las alhajas. Entre ellas figuran los relojes, anillos, collares y las pulseras, que se muestran como algunos de los obsequios lujosos con los que toda mujer quedaría encantada, ya que son de uso frecuente.
Agenda diaria
Las agendas son casi infaltables en la vida de una mujer, prácticamente desde la infancia. Por eso, cuenta como un regalo clásico para que depositen allí sus sentimientos o escritos diarios. Puede complementarse con una pluma o bolígrafo acorde al diseño de la agenda.
Retrato de fotos
Conmemorar a través de fotos impresas y enmarcadas los hechos que hayan vivido en pareja, ya sea de un viaje inolvidable, un paseo o simplemente un momento juntos, es una muestra de agradecimiento por todas las experiencias y aventuras atravesadas de a dos.
Una experiencia diferente
Nunca está de más animarse a una experiencia que rompa los hábitos amorosos, y mucho menos en el Día de los Enamorados. Por eso, salir de la rutina en pareja de vez en cuando puede ser divertido. Esto abarca desde acciones simples, como un desayuno exclusivo en la cama, un paseo por un lugar atractivo o una cena romántica ambientada para la ocasión, hasta un día de spa o un viaje de fin de semana.
Caja personalizada
Una caja decorada puede contener múltiples artículos. Si se trata de un regalo para la pareja en San Valentín, nunca falta el peluche, las cartas románticas, una taza personalizada y una amplia variedad de golosinas para los foodies (amantes de la comida). Un combo para conglomerar pequeños presentes, formando un regalo más abundante y significativo.
El promedio ideal para gastar
En 2016, los consumidores gastaron un total de $452 millones para regalos en San Valentín, según un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Este valor, que registró un incremento en el país, fue destinado a servicios -como una cena, un servicio de spa o desayuno a domicilio- y a bienes materiales, entre ellos, los regalos más habituales: flores, golosinas, perfumes y artículos de lencería.