Dos Estados levantan el muro judicial contra el segundo veto migratorio de Trump
Los fallos judiciales de Maryland y Hawai suponen un segundo revés legal para el gobierno de Trump, en tanto que la Casa Blanca prevé apelar a los dos jueces federales.
Un juez federal de Maryland falló este jueves en contra del segundo decreto migratorio del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, y agregó otro bloque al muro judicial contra la orden ejecutiva presidencial que empezó a levantar Hawai el miércoles, y que si crece puede terminar anulándola, tal como ocurrió con la primera versión.
Por su parte, el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, anunció que el equipo del presidente estadounidense prevé apelar las sentencias de los dos jueces federales que suspendieron la ejecución del segundo veto migratorio del mandatario.
El fallo del juez federal de Maryland, Theodore D. Chuang, se centró en una de las partes del veto migratorio de Trump, la suspensión de la emisión de visas para los ciudadanos de seis países de mayoría musulmana (Irán, Somalia, Sudán, Siria, Yemen y Libia).
Chuang subrayó que este veto supone “la puesta en práctica de la largamente anticipada prohibición a los musulmanes” y justificó su decisión por los comentarios realizados por Trump durante su campaña electoral.
La decisión de Maryland se añade a la que tomó el magistrado Derrick K. Watson, con sede en Honolulu, tras escuchar los argumentos de las autoridades de Hawai, el primer estado que desafió la medida, y dejó por ahora sin efecto la suspensión de ingreso al país de inmigrantes de los seis países y de todos los refugiados.
Poco después de conocerse el bloqueo del juez de Hawaii, el presidente de Estados Unidos calificó la decisión en un mitin en Nashville (Tennesee) el miércoles por la noche como “terrible” y agregó que “es, en opinión de muchos, una extralimitación judicial sin precedentes”.
En la audiencia de Hawai, los abogados del gobierno de ese estado argumentaron que la nueva medida, igual que la anterior, seguía siendo inconstitucional porque atentaba contra la libertad religiosa protegida en la primera Enmienda de la Constitución.
Según explicaron, es evidente que el decreto se dirige específicamente contra los musulmanes. Los representantes del gobierno de Hawai también sostuvieron que la medida de Trump dañaría al turismo en la isla y al sector empresarial y universitario, ya que impediría reclutar personal extranjero.
Por su parte, los abogados del gobierno de Trump argumentaron que el presidente tiene plena capacidad para determinar la política migratoria del país y que los argumentos del estado de Hawai no son más que “especulaciones”.