Por disposición de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) la principal prestadora de servicios de streaming a nivel mundial, Netflix, empezará a pagar impuestos en nuestro país.
Así lo afirmó el titular de la Afip, Alberto Abad, en una entrevista otorgada al diario La Nación, quien sostuvo que “lo haremos a través de los plásticos (de tarjeta de crédito) con que se paga el abono; las tarjetas serán agentes de retención”.
“Netflix recauda y paga impuestos en todo lugar en que tenga la obligación legal de hacerlo”, fue la respuesta, pero se desconoce si la empresa que provee contenidos audiovisuales a través de Internet absorberá ese costo o se lo trasladará a sus clientes.
Abad describió el desafío fiscal que implica cobrar impuestos en una “economía líquida, desmaterializada”, como las plataformas Netflix, Uber, Spotify o Airbnb. “Desaparece la intermediación, y el que junta a las dos puntas hace un gran negocio. El canal de cable que compite con este servicio paga impuestos, ¿por qué no una plataforma?”, planteó Abad, a la vez que apuntó que hay países en América latina donde Netflix ya tributa. La decisión de trasladar o no el valor a los usuarios es de la empresa, agregó.
Se estima que la Afip establecerá que las tarjetas de crédito (por las cuales se compra este servicio) deberán recibir de Netflix “un adelanto a cuenta de obligaciones tributarias por la venta de servicios”. El impuesto más importante sería el IVA, que tributa una tasa del 21%.
En la reforma tributaria colombiana de 2016, se incluyó un “pago o abono” adicional a las emisoras de tarjetas por “suministros de servicios audiovisuales (música, videos, películas y juegos de cualquier tipo).
A fines de 2014, el gobierno de la ciudad de Buenos Aires -entonces comandado por el hoy presidente Mauricio Macri- ganó la pulseada en la Justicia y le impuso a Netflix, Spotify y otras empresas que prestan servicios en el país, pero no pagan impuestos por estar radicadas en el exterior, un gravamen del 3% sobre el valor de compra de sus productos, como anticipo del pago de Ingresos Brutos. Rige desde febrero de 2015.
En diciembre pasado, la Legislatura santafecina avaló el cobro de una alícuota del 3,6% de Ingresos Brutos a las empresas que comercialicen en forma electrónica entretenimientos audiovisuales, entre las que se cuenta Netflix. El 25% de lo recaudado se destina al desarrollo de las industrias de base cultural de la provincia. Rubén Galassi, diputado provincial socialista y autor de la iniciativa, fundamentó la decisión en que corporaciones como Netflix son “multinacionales que no generan trabajo en el país y no tributan un solo centavo” en la provincia. “Con esta ley se autoriza al Ejecutivo provincial para que establezca mecanismos para que este tipo de empresas también tributen.”
En Estados Unidos, plataformas como Netflix pagan impuestos, por ejemplo, en Pennsylvania, Chicago y Minnesota, con un canon que va entre el 6 y el 9%; también lo hacen varias ciudades canadienses.
En el último proyecto impositivo que presentó al Parlamento hace unas semanas, el gobierno de Uruguay incluyó cambios (regirán a partir de 2018 si se aprueban) para gravar a plataformas que ofrecen películas y series, música, hacen transmisiones televisivas en directo o intermedian en la prestación de servicios. En Chile el tema está bajo análisis.
Por ejemplo, a nivel nacional la plataforma Mercado Libre -que pone en contacto a vendedores con compradores a través de la web- paga IVA sobre sus comisiones y para la AFIP es agente de retención para los vendedores, por el IVA de la compra y venta que hace entre terceros.
Fuente: La Nación