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El ejército sirio se prepara para tomar Alepo

El régimen sirio prepara el lanzamiento de una ofensiva para reconquistar la provincia de Alepo (norte), donde el recrudecimiento de los combates y los bombardeos ha matado a unas 200 personas en una semana, escribió un diario cercano al régimen del presidente Bashar Al Asad.

“Ahora es el momento de lanzar la batalla para la liberación total de Alepo”, anunció el jueves en Damasco el diario Al Watan, próximo al gobierno sirio. “No es un secreto que el ejército sirio y sus aliados han preparado esta batalla decisiva”, añadió.

El objetivo del régimen de Al Asad es retomar los sectores de Alepo en manos de los rebeldes desde hace cuatro años. La segunda ciudad de Siria está dividida desde julio de 2012 entre los barrios controlados por el ejército al oeste y por la rebelión al este.

La situación de Alepo preocupa al enviado de Naciones Unidad para Siria, Staffan de Mistura, que instó a Rusia y a Estados Unidos a tomar “una iniciativa urgente”. Moscú y Washington promovieron la maltrecha tregua actual que entró en vigor el 27 de febrero.

Otros 53 civiles muertos

Los ataques aéreos del régimen contra los barrios rebeldes y los bombardeos de los insurgentes sobre los barrios gubernamentales han dejado 200 muertos y cientos de heridos en una semana, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

Al menos 53 civiles más perdieron la vida el jueves. Los ataques del régimen mataron a 31 personas, entre ellas tres niños, mientras que los bombardeos rebeldes provocaron la muerte de 22 personas, dos de ellas menores de edad, precisó el OSDH.

En el popular barrio rebelde de Bustan al Qasr, todos los edificios visibles se habían visto afectados por los bombardeos. “Los aviones devastaron hoy todo el barrio”, indicó un habitante.

Para el Comité Internacional de Cruz Roja (CICR), Alepo se encuentra “a las puertas de un desastre humanitario”. “Allá donde estén, pueden escuchar las mortales explosiones, los bombardeos y el vuelo de los aviones”, expresó Valter Gros, el representante del CICR en la ciudad.

Un bombardeo contra un hospital en el barrio de Al Sukari, en la zona este de Alepo, ya había dejado el miércoles 30 muertos, entre ellos el único pediatra del sector rebelde, informó el grupo Cascos Blancos, un servicio de defensa civil.

Médicos Sin Fronteras (MSF), que otorgaba ayuda al “principal centro pediátrico” bombardeado, condenó el ataque. “Los hospitales no son un blanco”, dijo el grupo en Twitter, utilizando la etiqueta en inglés #notatarget.

Emergencia humanitaria

Entretanto más al norte de la provincia de Alepo y cerca de la frontera con Turquía, 53 rebeldes, en su mayoría islamistas, y 11 combatientes de las Fuerzas Democráticas Sirias (alianza árabo-kurda) murieron en enfrentamientos en la zona de Tal Rifat, ciudad controlada por los kurdos. Los rebeldes atacaron el miércoles la localidad, pero los kurdos repelieron la ofensiva.

Fotos difundidas en las redes sociales muestran los cadáveres de combatientes rebeldes en la ciudad kurda de Afrin. Según el OSDH, se trata del mayor número de rebeldes muertos en una batalla contra los kurdos.

De Mistura reunió este jueves al Grupo de Trabajo sobre el Acceso Humanitario y al Grupo Internacional de Apoyo a Siria (GIAS), compuesto por 17 países bajo la copresidencia de Rusia y Estados Unidos. Al término de la reunión, Naciones Unidas advirtió que la continuación de los combates podría frenar la llegada de ayuda de emergencia a cientos de miles de sirios.

Según el director del grupo de trabajo humanitario, Jan Egeland, la ayuda humanitaria ha llegado ya a un 52% de zonas sitiadas y a 255.000 personas. Pero las agencias de ayuda humanitaria no han podido visitar todavía 35 localidades, donde viven 905.000 personas, lamentó Egeland, entre ellas Duma, Harasta, Daraya, Erbin, Zamalka y Zabdin.

“Deberíamos estar avergonzados de que esto ocurra”, señaló ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas el responsable de la ayuda humanitaria en Siria, Stephen O’Brien, quien instó a revitalizar el cese al fuego y poner fin “al masivo sufrimiento” provocado por la falta de alimentos y medicinas.

 

Fuente: Noticias Argentinas

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