Fusionar ministerios, el plan que tiene el Gobierno para ajustar y achicar el déficit
A esta altura ya se trata de una novela, con muchos capítulos y un desenlace incierto. Cuando parecía que Mauricio Macri había descartado la reducción de ministerios, la discusión por el Presupuesto 2019 volvió a instalar el tema en su mesa chica y ahora no le cierra la puerta. Así lo confiaron a Clarín altas fuentes oficiales, al cabo de las reuniones que el Presidente encabezó la semana pasada por el ajuste del Presupuesto.
En uno de esos encuentros, Macri aceptó analizar la propuesta que le sugirió el G-8, el grupo de ocho dirigentes que lo asesora, luego de repasar los números que pule el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne. El dato no deja de sorprender dado que hace menos de un mes el Gobierno parecía estar decidido a mantener a los 19 ministros ¿Qué cambió? En principio, que por los recortes,varios ministerios quedarán con cajas similares a las de una secretaría de Estado. Es que, como contó este diario, el Presidente sabe que la cifra que necesita achicar su Gobierno para cumplir con el 1,3% de déficit fiscal que contempla el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional es más audaz de lo previsto: 300 mil millones de pesos, de los cuales la mitad deberá correr por cuenta del Estado nacional.
Es cierto que a esos $ 150 mil millones hay que restarles los $ 20 mil millones que, por el decreto que firmó Macri, se ahorrará el Ejecutivo por gastos de viajes, viáticos y vehículos destinados a funcionarios de menor rango, entre otros ítems.
Pero reducir 130 mil millones de pesos implica un esfuerzo adicional que el propio Dujovne ya se encargó de transmitirles a sus colegas del Gabinete, con los que viene trabajando en un borrador. Un dato elocuente de los cambios que imprimió Macri: en esas reuniones de Presupuesto, por primera vez no participan Gustavo Lopetegui y Mario Quintana. Sus funciones, en un Gabinete más chico, también podrían cambiar.
Hasta ahora, las únicas fusiones que aceptó hacer Macri fueron la transformación del Ministerio de Comunicaciones en una secretaría bajo la órbita de Modernización y la absorción de Finanzas por parte de Dujovne, en Hacienda. Esta vez puede ser diferente. Los que están en la mira, ya que según fuentes oficiales serán los más afectados por los recortes, son: Agroindustria, Ambiente, Ciencia y Tecnología, Cultura, Producción, y Turismo.
Dujovne podría resultar uno de los favorecidos en caso de fusiones: Agroindustria, Producción y Turismo tendrían lugar en su cartera.En tanto, Educación e Interior son otros ministerios que, se prevé, sufrirán fuertes recortes por las transferencias a las provincias. Pero no corren peligro: en el caso de Educación, podría absorber otros ministerios. Se habla de Cultura y Ciencia y Tecnología. Ambiente podría pasar a secretaría. Interior reducirá las transferencias en obras, pero es el brazo armado de Macri para hacer política, por lo que nadie imagina cambios.
De vuelta en el Presupuesto, el mensaje de Dujovne fue claro: sólo se mantendrá lo esencial de cada área. “Cada ministro puntea sus prioridades, lo que es ‘imposible’ de eliminar’, y lo que puede transferirse a las provincias y puede ser motivo de negociación con los gobernadores. El resto se saca”, puntualizó, con crudeza, una voz al tanto de la elaboración del proyecto.
Con estos parámetros, hay ministerios que perderán mucho más que otros. No hay, aclaran en Casa Rosada, un porcentaje uniforme de reducción de presupuestos. Pero varios ministros, cuando repasaron los números, advirtieron algo similar a lo que pregonan en esa mesa que integran, además de Peña, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta; la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal; el ministro del Interior, Rogelio Frigerio; el titular de Diputados, Emilio Monzó, y el tridente de gobernadores radicales, Alfredo Cornejo (Mendoza), Gerardo Morales (Jujuy) y Gustavo Valdés.
“Si se concreta ese recorte, a varios nos queda (el ministerio) hecho una cáscara”, concedió un funcionario. Todos, salvo algún caso excepcional, comprenden la situación, aseguran en el Gobierno: “Saben que no es decisión ni de Marcos (Peña), ni de Nicolás (Dujovne), sino de Mauricio. Y eso anula cualquier enojo”, dicen.
La semana pasada se comenzó a evaluar el tema en reuniones que encabezó Peña y el planteo le llegó, nuevamente, al Presidente. “No cerró ninguna puerta”, aseguraron altas fuentes de Gobierno. Acaso en la cabeza de Macri también influya que varios gobernadores del PJ, cuando pasaron por su despacho, le reclamaron empezar el recorte por casa. Igual, a sabiendas de que a Macri le gusta trabajar con un número grande de ministerios, no se animan a arriesgar un final. Desde que asumió, la reducción de Gabinete se mencionó como una posibilidad. La mayoría de las veces, desde un costado simbólico: con el argumento de que podía enviar así una señal de austeridad a la sociedad.
(Fuente:Clarín)