Un ataque a un hotel de Somalia provocó al menos 11 muertos
Al menos 11 muertos dejó un ataque con explosivos y arma automática al hotel Naasa Hablood de la capital somalí Mogadiscio, reivindicado por los insurgentes islamistas shebab en las redes sociales.
“Las fuerzas especiales terminaron el operativo tras haber matado a tres atacantes al interior del hotel. Once civiles, entre ellos dos médicos, murieron en el ataque”, declaró a la prensa el portavoz del ministro de la Seguridad, Abdi Kamil Shukri. Además de esas víctimas, el ataque causó veinte heridos, según uno de los responsables. El anterior balance era de al menos cinco muertos, entre ellos tres guardias de seguridad.
El ataque fue reivindicado por los insurgentes islamistas somalíes shebab en un comunicado enviado por las redes sociales. En los últimos meses, los islamistas shebab, que juraron la caída del gobierno somalí, multiplicaron sus sangrientos ataques contra restaurantes y hoteles más destacados de Mogadiscio.
El Naasa Hablood es un hotel en el que se suelen hospedar políticos y miembros de la diáspora. Está situado en la zona norte de la capital. Este ataque se produjo después de tres semanas del que tuvo lugar en el hotel Ambassador el 1 de junio, que dejó 10 muertos.
Mismo modus operandi
Los ataques a los hoteles realizados por los shebab tienen el mismo modo de operar. Un coche bomba es lanzado a toda velocidad por un conductor suicida contra el lugar, a veces fortificado. Y luego un comando armado penetra al interior para matar a la clientela y al personal.
El 1 de noviembre pasado, unas 12 personas murieron de esta manera en el ataque del hotel Sahafi, situado en el centro de Mogadiscio y frecuentado por parlamentarios, funcionarios y hombres de negocios. A fines de febrero, atacaron el hotel YSL situado en el centro de la capital somalí con un coche lleno de explosivos. Pero no lograron penetrar al sitio.
Confrontados a la potencia de fuego superior de la fuerza de la Unión Africana en Somalia (AMISOM), desplegada en 2007, los shebab fueron expulsados de Mogadiscio en agosto de 2011. Luego perdieron los principales bastiones, pero controlan siempre vastas zonas rurales desde donde realizan operaciones de guerrilla y atentados suicidas, a veces hasta en la capital, contra los símbolos del frágil gobierno somalí o contra la AMISOM.
En los últimos meses, reivindicaron operaciones espectaculares, tanto en Mogadiscio como contra las bases de esta fuerza africana. En enero, destruyeron totalmente una base del contingente keniano de la AMISOM en El Adde, en el sur de Somalia, e incautaron armamento e importantes cantidades de explosivos.
Fuente: Noticias Argentinas