Inundaciones en Luisiana dejaron 13 personas muertas
Las inundaciones sin precedentes en Luisiana dejaron 13 personas muertas, informaron las autoridades el jueves, cuando el retiro de las aguas dejó en evidencia la magnitud del desastre en ese estado del sur de Estados Unidos.
Los equipos de rescate iban casa por casa en busca de víctimas de las inundaciones. De esta manera, el numero de víctimas mortales fue ascendiendo lentamente y la portavoz del gobernador John Edwards Bel confirmó 13 muertes, dos más que el miércoles.
En muchas áreas el nivel de las aguas había descendido y ya se estaban secando. No obstante, el Servicio Meteorológico Nacional estimó que había que esperar hasta el viernes para que el agua bajara hasta quedar por debajo del nivel de inundación.
“Sigue habiendo inundaciones”, dijo el gobernador a los medios locales el miércoles, mientras recorría las zonas de desastre. “No quiero que nadie piense que dimos vuelta la página”.
Veintidós de las 64 condados del estado fueron declaradas zonas de desastre, lo que permitirá darles asistencia federal.
Gigantescos incendios en California
California se enfrentaba el jueves a gigantescos incendios alimentados por los fuertes vientos y una ola de calor, que seguían forzando a miles de personas a permanecer fuera de sus casas por miedo a las llamas.
“La actividad de los fuegos ha aumentado en las últimas semanas”, señaló el portavoz de la agencia estatal CalFire, Daniel Berlant, quien subrayó la alta peligrosidad que representan.
El terrible incendio Bluecut, que ya ha consumido más de 12.800 hectáreas, continuaba ardiendo sin control en un bosque situado en el condado de San Bernardino, a más de 100 kilómetros al este de Los Ángeles. Los bomberos sólo habían podido controlarlo en un 4%.
Más de 82.000 personas fueron evacuadas y 34.500 estructuras están amenazadas por las llamas que se originaron a media mañana del martes.
Uno de los mayores enemigos del personal de emergencia es el fuerte viento, que alcanza ráfagas de hasta 50 kilómetros por hora y alienta la expansión de los focos, aunque se espera que bajen su intensidad cuando caiga el sol.
El estado de emergencia activado por el gobernador de California, Jerry Brown, seguía vigente para poder usar los recursos de todas las agencias gubernamentales californianas para luchar contra los incendios.