El empresario Aldo Roggio se sumó a la lista de los arrepentidos
El poderoso titular de la constructora que lleva su nombre acordó con el fiscal ser un “imputado colaborador”.
El empresario Aldo Roggio se convirtió en arrepentido en la causa de las coimas reveladas por los cuadernos del chofer Oscar Centeno.
Roggio se presentó este martes ante el juez Claudio Bonadio a ampliar su declaración para lograr que lo considere un imputado colaborador. La primera información proporcionada no había sido suficiente. Es que en la causa ya hay más de diez arrepentidos, y quienes piden acogerse a este régimen deben aportar información cada vez más relevante para la causa.
En su declaración inicial ante el fiscal Carlos Stornelli, el empresarionegó haber aportado los fondos millonarios que se le adjudican como sobornos en los cuadernos de Centeno, y ante la fiscalía habló de “pagos aislados” aproximados de 100 mil dólares cada uno. Sin embargo, según trascendió, esos datos no habrían sido suficientes para Bonadio, y es posible que Roggio deba volver a declarar.
El empresario quedó imputado como partícipe necesario de la asociación ilícitapor la que los principales directivos de empresas de primera líneas entregaban coimas millonarias, principalmente a Roberto Baratta, quien actuaba como mano derecha del ministro de Planificación, Julio De Vido.
Roggio se presentó espontáneamente después de ser llamado a indagatoria, para admitir que durante el gobierno kirchnerista su compañía aceptó realizar pagos de fondos ilegales. El fiscal Stornelli determinó en la acusación formal que la asociación ilícita que “comandó Néstor y Cristina Kirchner” cumplió con sus objetivos, porque contó con el aporte indispensable de los empresarios que, en un “sinnúmero de oportunidades” entregaron dinero por más de 35 millones de dólares.