Turquía detuvo a 13 sospechosos después del atentado de Estambul
La policía turca detuvo el jueves a 13 sospechosos, entre ellos tres extranjeros, tras los atentados suicidas en el aeropuerto de Estambul que dejaron 44 muertos y más de 200 heridos.
El balance de muertos aumentó a 44 el jueves, según la agencia estatal Anadolu, tras la matanza provocada el martes en el aeropuerto internacional Ataturk por tres terroristas suicidas, muy probablemente relacionados según Ankara con el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
El ministro del Interior anunció que más extranjeros de los que se creía en un principio figuraban entre las víctimas mortales. De las 44 personas que perdieron la vida en este ataque, 19 son ciudadanos extranjeros, según el ministro Efkan Ala.
El primer ministro Binali Yildirim explicaba el miércoles que “los terroristas, después de intentar pasar los (primeros) controles de seguridad” justo en la entrada de la terminal, cambiaron de opinión y “volvieron con fusiles ametralladoras que sacaron de sus maletas antes de pasar los controles disparando indiscriminadamente contra la gente”. “Uno de ellos se hizo explotar en el exterior” y “los otros dos aprovecharon el pánico, entraron al aeropuerto y se hicieron explotar”, dijo.
Un alto responsable turco cercano a la presidencia proporcionó otra versión. Primero una explosión tuvo lugar cuando un suicida entró en el vestíbulo de llegadas y se hizo estallar. Después, un segundo, aprovechando el pánico, entró y subió a salidas, donde accionó su carga. Finalmente, el tercero que esperaba fuera se explotó el último.
El jueves, el atentado aún no había sido reivindicado y las autoridades turcas todavía no identificaron a los atacantes. El diario Hurriyet informó que uno de los atacantes era un combatiente checheno de nombre Osman Vadinov, que habría venido a Turquía desde Raqa, feudo del Estado Islámico en Siria.
El modus operandi de los atentados en Ataturk recuerda a los ataques yihadistas de noviembre en París (130 muertos) y de Bruselas (32 muertos). Varias fotos y videos estremecedores compartidos en las redes sociales mostraban una enorme bola de fuego a la entrada de la terminal de vuelos internacionales y a pasajeros tendidos en el suelo del hall.
Estambul y Ankara han sido golpeadas desde el año pasado por una serie de atentados que dejaron 260 muertos y han creado un clima de fuerte inseguridad.
Fuente: Noticias Argentinas